LA HUERTA

Volver al campo, rescatar las tradiciones y enseñanzas de nuestros ancestros, cuidar y honrar nuestra tierra,  cultivar y ver crecer cada semilla regada con amor y paciencia. A nuestra huerta se accede por el Jardín Secreto, se recorre sin prisa, con una canasta en la mano y el olor a tierra y con el aire puro en la cara. Se disfruta de lo básico pero lo realmente importante. Se enseña a cultivar, se recogen los productos frescos  de nuestra cosecha y nuestro trabajo.